Inspira: Nick Veasey, el artista de Adobe y los Rayos X

Siempre intento guardar en la memoria aquellos momentos en los que, cirscunstancialmente, he sido consciente de que algo es hermoso o, cuanto menos, estético.

Entre otros muchos recuerdos, tengo muy presente el momento en que tuve entre mis manos por primera vez una radiografía. Qué belleza! Qué elegancia!

He de decir, que a pesar que de siempre fui una cabra loca sin miedo a las alturas, jamás me rompí un sólo hueso en mi vida. Así que el momento radiografía en mano, no lo viví hasta los 11 ó 12 años. Un día en el cole, tras una exploración, le dijeron a mi madre que tenía escoliosis. Al día siguiente, me descubrí sujetando y admirando esa hermosa pieza negra revelada sobre una película con un grosor gordísimo y a tamaño real por primera vez en mi vida. ¿Podía ser más perfecta? Más perfecta en concepto, la verdad, no sé, pero habida cuenta que el uso de estas revelaciones internas de la naturaleza es exclusivamente médico, se me ocurre que debería haber un uso un poco más creativo. La grata noticia es que el uso creativo existe y mucho más cercano de lo que pensamos.

¿Alguna vez os habéis preguntado quién está detrás de la magnífica obra gráfica de la que dispone ADOBE para adornar el packagin en cada una de sus versiones?

Pues os desvelaré que, en esta ocasión, la suite CS2 de ADOBE en el año 2005, cuyas famosas plumitas hemos visto cientos de veces en esos años en los que esta suite gobernaba nuestras vidas, eran obra y gracia del mismísimo Nick Veasey (Londrés, 1963). Este fantástico artista inglés, cuyo trabajo pasa por rayos X, confesó a la revista El Duende (Septiembre-Octubre 2008) que todo empezó porque siempre tuvo curiosidad de saber qué había debajo de las chicas…Humor inglés aparte, no dejéis de curiosear la obra de este singular artista que nos confiesa que lo que más le gusta de su trabajo es dejar TODO al descubierto. WOW!

He aquí una pequeña muestra de su amplio repertorio gráfico que va desde muñecos de plástico a el aparatoso desnudo interno de diversos insectos.

PD.: El lado menos romántico de esta historia es que el famoso día del descubrimiento radiológico tampoco lo olvido por un sencillo motivo: Sigo padeciendo escoliosis…

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